La pregunta más repetida en estos tiempos de pandemia
Nos ponemos a pensar cuál sería esta pregunta, y surgen algunas como:
¿Hasta cuándo?
¿Y la cura?
¿Una semana más?
¿Qué está pasando?
Incluso una pregunta que en mis sesiones de coaching pocas veces dejo afuera: ¿cómo te sientes?
Podríamos pensar que son las preguntas más mencionadas en esta época.
Pero sabes, analizando el comportamiento humano y lo magnífico que somos, la pregunta más mencionada podría estar relacionada con las necesidades básicas del ser, tales como el agua, la alimentación y el tener una vivienda, y de esta manera solventar, lo más rápido posible, las necesidades básicas de la pirámide definida por el gran psicólogo Abraham Maslow.
Hasta este punto no la sabemos, pero esa pregunta debería institucionalizarse en todos los sectores donde nos movemos: en la casa – acatando la cuarentena -, en las instituciones, en el entorno laboral, incluso en los círculos sociales, y hasta en nuestro tiempo de ocio o entretenimiento.
Esta pregunta, que desconocemos hasta este punto del texto – Jorge ¡¿cuál es?! – requiere de un momento más para profundizar en su significado constructivo, que te permitirá hacer un alto en el camino, con mayor nivel de consciencia, y te darás cuenta que valió la pena haber dedicado unos segundos de tu vida a leer este Blog.
El dar respuesta a esta pregunta debe ir más allá de un simple “SI”: debe ser sincera, empática y amorosa, en caso que sea dada en un contexto cara a cara, y en el caso actual que nos movemos en un escenario virtual, cimentará una estructura no solo de atención, sino de reconocimiento al otro, generando en ambos interlocutores múltiples posibilidades que hoy pareciera que no existieran por el afán diario.
Por fortuna – aunque suene cruel – el Covid 19 nos mostró que éramos muy prepotentes.
Continúo …
Permite de una buena vez no solo responder “Si”; define qué otras preguntas pudieras hacer incluso después de responder afirmativamente. Te puedo garantizar por los estudios realizados en casos puntales de personas que se suicidan o lo intentan que el dar respuesta profunda a esta pregunta te levantará, no solo a ti sino a miles de vidas que están esperando que alguien en la tierra les preste más atención.
¡Wao! y hablé de suicidio, sin dejar al lado la depresión, tristeza, frustración y otras palabras que tenemos, escuchamos a diario y no accionamos sobre ellas, convirtiéndose nuestra inacción en un virus más peligroso que el covid.
Padres ausentes, desinterés social, escasa empatía y un sinnúmero de razones que están llevando a que especialmente los jóvenes no deseen vivir, por el solo hecho de no ser escuchados.
Entonces Jorge, ¿cuál es la pregunta?….
Y la Pregunta es…
Poniendo más suspensos…
ta ta ta ta ta …
¿Me escuchas? O ¿me escuchan?
En medio de una conversación, por cualquier plataforma donde tengas que conversar virtualmente.
Se repite esa pregunta, ¿me escuchan?, y piensa en un instante cuántas veces has hecho esta pregunta antes de empezar tu diálogo…. casi siempre. ¿Me escuchan?
y la respuesta es…
¡Siii!. Te escucho. Pero de verdad si es así.
Aquí estoy para apoyarte, para acompañarte en este camino llamado vida y que recorreremos en El BUS.
Miles de personas se quitan la vida porque durante mucho tiempo la respuesta de sus seres queridos ha sido solamente “si”; jamás se percataron que lo único que necesitaba esa persona era la posibilidad de estar en presencia, entenderla, aceptarla, valorarla y tener conversaciones de valor. Y decirle también…
¿Me escuchas?
Y que no solo te responda “si” por compromiso, sino para que se genere también un apoyo mutuo, donde el amor que brindas integra a partir de ese momento de un círculo virtuoso.
La gran tarea en esta temporada, no es solo responde si a esa pregunta, es definitivamente, aprender a escuchar y acompañar con más preguntas a estas preguntas que a causa de un “si” por compromiso o incluso ninguna respuesta, sienten en su interior que su vida no vale nada, porque nadie los valora.
Pues si vales y mucho, porque el que te dio la vida confió, confía y confiara en ti. Si alguien en el plano terrenal, no te escucha, pues cuéntale todo en oración al padre que está en el cielo y ten la plena seguridad y te lo digo por testimonio propio que al terminar tu conversación con Dios, si le preguntas…
¿Me escuchas?
Él no solo dirá SI, sino que te dará respuestas que jamás en tu vida te hubieses esperado.
Hoy es el día de aprender a escuchar, de seguro con esa sola accion, salvaras una vida.
Jorge Baena
Coach/Artista
@jorgebaena15
Facilitador de consciencia
El blog de Baena